Peter Boyle, reconocido por su diversidad de papeles, desde un monstruo bailarín de tap en Young Frankenstein (1974) hasta el padre cascarrabias en la serie de televisión Everybody Loves Raymond, falleció hoy. Tenía 71 años.
Boyle adquirió notoriedad en 1974 como un monstruo creado en un laboratorio en la comedia de terror de Mel Brooks. El momento decisivo de la cinta se produjo cuando Gene Wilder, en el papel del científico Frederick Frankenstein, presentó su creación ante un elegante público, que vio a Boyle cantar y bailar el clásico de Irving Berlin “Puttin´ On the Ritz“.El filme mostró otro ángulo del actor ganador del Premio Emmy, explotado en numerosas películas y más recientemente en Everybody Loves Raymond, en la que por 10 años dio vida al incorregible jefe de familia Frank Barone.